Al ritmo vertiginoso al que va el mundo digital de hoy en día, es de suma importancia mantener los mayores niveles de calidad posibles en cualquier producto o servicio. El aseguramiento de la calidad o quality assurance (QA) desempeña un papel crucial en la consecución de este objetivo. En este artículo exploramos qué es el quality assurance, quién se encarga de él, a quién beneficia y cómo podemos implementarlo en equipos actuales con workflows digitales.
¿Qué es el quality assurance?
El quality assurance es un proceso sistematizado que garantiza que los productos y servicios cumplen unos requisitos específicos y las expectativas del cliente. El objetivo del aseguramiento de la calidad, a diferencia del control de calidad o quality control que identifica defectos en el producto final, es mejorar y establecer procesos para evitar que se produzcan errores. Abarca todas las fases de producción, desde el diseño inicial hasta la entrega.
¿Quién se encarga del quality assurance?
En los modelos de equipo actuales, la responsabilidad recae sobre un equipo específico de QA. El equipo puede estar formado por analistas, ingenieros de pruebas y especialistas en mejora de procesos. Sin embargo, el quality assurance es responsabilidad de todos los miembros del equipo: desarrolladores, gestores de proyecto, etc. Un QA de calidad requiere de colaboración y comunicación activa en todo el equipo para garantizar que se mantienen los estándares de calidad en todas las etapas del proyecto.
¿A quién beneficia el quality assurance?
El quality assurance favorece a todas las partes implicadas:
- El cliente: recibe productos y servicios que cumplen con sus expectativas y satisfacen sus necesidades, factores que influyen en la fidelización.
- La empresa: reduce costes ligados a la resolución de problemas en posproducción, mejora su reputación como marca y optimiza procedimientos internos.
- La plantilla: trabaja en un contexto organizado y eficiente, lo que mejora su actitud hacia el trabajo y aumenta la productividad.
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6 pasos para implementar el quality assurance
Para poner en práctica un sistema de quality assurance en equipos actuales con workflows digitales hay que partir de un proceso estructurado que aproveche al máximo las herramientas digitales y los flujos de trabajo a su disposición. Los siguientes son algunos pasos clave:
1. Definir los estándares de calidad: lo que no se puede medir no se puede mejorar
Establecer unos criterios claros y mensurables que debe cumplir un producto o servido de alta calidad. Se deben incluir especificaciones técnicas, requisitos del cliente y normas del sector. Con estos hitos establecidos, los equipos pueden aunar esfuerzos hacia un nivel de calidad común.
2. Documentar los procesos: coherencia y claridad desde el principio
Una documentación exhaustiva de los procesos es crucial. De esta forma se garantiza la coherencia y resulta más fácil identificar áreas de mejora. La documentación debe abarcar todos los aspectos del flujo de trabajo, desde la planificación inicial hasta la entrega final.
3. Automatizar pruebas: el tiempo es oro
Utilizar herramientas de automatización para agilizar tareas de testing largas y repetitivas. La automatización de estos procesos no solo ahorra tiempo, sino que también reduce el riesgo de error humano. Hay muchas herramientas de automatización de pruebas disponibles según el tipo de producto o servicio y pueden integrarse en el flujo de trabajo para optimizar el proceso de testing.
4. Realizar revisiones y controles periódicos: más ven cuatro ojos que dos
Organizar revisiones y controles periódicos para garantizar que se están cumpliendo los estándares de calidad. Por ejemplo, revisiones de código, controles de procesos y evaluaciones de rendimiento. Las evaluaciones periódicas ayudan a detectar posibles problemas y permiten tomar medidas a tiempo.
5. Fomentar la comunicación y la colaboración: todos a una
Establecer vías de comunicación claras entre los miembros del equipo. Una colaboración eficaz facilita la identificación y la resolución de problemas, y garantiza que todos tengan en cuenta el mismo objetivo de calidad.
6. Ofrecer formación continua: el saber no ocupa lugar
Proporcionar oportunidades de formación continua y desarrollo para los miembros del equipo. Para conseguir y mantener unos estándares de calidad, es vital actualizarse y estar al día sobre buenas prácticas y nuevas tecnologías de QA.
Conclusión
El quality assurance es vital para el éxito de cualquier equipo actual. Al centrarse en la mejora continua de los procesos y en una colaboración eficaz, las empresas pueden garantizar que sus productos no solo cumplen las normas de calidad, sino que también superan las expectativas del cliente. Poner en práctica los pasos descritos anteriormente en un entorno de workflows digitales ayudará a tu equipo a cumplir unos estándares de alta calidad. De esta forma, el nivel de calidad del producto o servicio final repercutirá en la satisfacción del cliente y supondrá un éxito para la empresa.
