Tres tendencias en RRHH para el éxito de los equipos internacionales
A medida que las plantillas se vuelven cada vez más globalizadas, la comunicación internacional se convierte en un reto fundamental que deben abordar los equipos de RRHH. Según una encuesta realizada por la Economist Intelligence Unit (EIU), la gestión del personal es uno de los principales retos a los que deben enfrentarse las organizaciones en la actualidad, seguido tan solo por el lento crecimiento en mercados clave.
En la 4.ª encuesta anual Speexx Exchange, los encuestados reconocieron que sus empresas se enfrentaban a distintos desafíos en relación con la internacionalización:
- El 24 % de los encuestados citó diferencias interculturales como un factor de influencia negativa
- El 21 % mencionó la falta de capacidades para hablar idiomas extranjeros como un problema
Las nuevas tendencias en RRHH reflejan la necesidad de abordar estos aspectos a través de una serie de soluciones relacionadas de forma directa con la comunicación internacional. Desde la tecnología a la cultura, a continuación encontramos algunas medidas efectivas que se están aplicando cada vez más.
1.- Gestión de las relaciones con los empleados
En muchos casos, un equipo multinacional implica un equipo ampliamente deslocalizado, fruto de la tendencia cada vez más generalizada del abandono de la organización tradicional y jerárquica. Dejando a un lado las diferencias culturales, existen problemas de carácter logístico que pueden interponerse en la comunicación, como los distintos husos horarios y la utilización de herramientas poco eficientes.
Para eliminar los retrasos y las barreras que permiten sacar el trabajo adelante, la información debe estar centralizada y ser de fácil acceso. Si anteriormente la gestión de las relaciones con el cliente (CRM) era la prioridad, ahora la gestión de las relaciones con los empleados es igualmente importante. Disponer de contenidos internos claros y personalizados es fundamental. En combinación con otras nuevas herramientas de trabajo online, esto permitirá a los empleados colaborar fácilmente, incluso entre fronteras internacionales.
2.- Formación en idiomas
Según una encuesta de la EIU, la sensibilidad cultural es una capacidad clave para garantizar el éxito de un empleado expatriado. Adaptarse a una nueva cultura a menudo requiere el desarrollo de competencias lingüísticas. Esto se aplica igualmente en el caso de empresas que buscan modos de acceder a nuevos mercados. Debido al auge de la globalización, las competencias lingüísticas se están haciendo cada vez más necesarias para las empresas, como parte de su estrategia general.
No todas las personas necesitan los mismos conocimientos o el mismo nivel en una lengua extranjera, por lo que los enfoques de formación también deberían ser diferentes. Speexx se adapta a las necesidades individuales ofreciendo programas de aprendizaje de idiomas personalizados para ejecutivos y empleados. Por ejemplo, un ejecutivo que solo se comunique con clientes empresariales podría necesitar un vocabulario distinto al de un empleado del departamento de ventas, marketing o soporte al cliente.
3.- Fomento de la cultura corporativa
En una época en la que el personal se encuentra disperso a lo largo de todo el mundo, quizá la tendencia principal sea la importancia cada vez mayor de disponer de una sólida cultura corporativa. De acuerdo con las estimaciones de que, para 2020, casi la mitad de la población en activo estará compuesta por personas de la Generación Y, ya no basta con esperar que los empleados trabajen simplemente a cambio de un sueldo. Los valores de la empresa deberán ser acordes con los valores de sus empleados.
Desarrollar una sólida cultura empresarial también garantizará que su diversa plantilla multinacional de empleados pueda desarrollar un sentimiento de pertenencia, en lugar de estar dividida por las barreras culturales. Cuando los empleados comparten un objetivo común y entienden los valores de la empresa, pueden empezar a colaborar y a comunicarse con mayor efectividad.
Tal y como dijo Jim Burns, el presidente de Ceridian, «las personas son el único activo de una empresa que incrementa su valor.» Por tanto, iniciativas como la gestión de las relaciones con los empleados, la formación en idiomas extranjeros y disponer de una sólida cultura corporativa son inversiones directas en su negocio. Al mismo tiempo, incrementan el valor del empleado e impulsan su entusiasmo por permanecer en la empresa.
Si quieres más información sobre cómo fomentar la comunicación, lee nuestra publicación sobre cómo priorizar las competencias de comunicación corporativa.
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